Conectividad rural: la brecha que grandes y pequeños operadores quieren hacer rentable

Antes de que la pandemia hiciera urgente el acceso a internet para intentar continuar la vida desde las casas, ya el país venía avanzando en conectividad de manera sostenida. Se han incorporado más de un millón de nuevos usuarios fijos y casi dos millones más de usuarios de internet por celular desde el segundo trimestre del 2019. 

A pesar del avance de la conexión fija y móvil, en el campo, la brecha digital sigue siendo inmensa. Aunque comienzan a surgir iniciativas privadas para satisfacer esa necesidad.

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“No solamente hay que hacer más rentable el negocio desde el punto de vista de los operadores, sino simplificar los costos administrativos y hacer que la gente se interese y que mejoren los ingresos del campo para que puedan invertir en los equipos que necesitan para soportar el servicio de internet”, dice Juan David Vinasco, asesor del gobierno en temas de conectividad.

Vinasco, un apasionado por el tema de la conectividad rural, estudió una maestría en regulación de mercados con énfasis en regulación de telecomunicaciones en la Universidad Carlos III en España, con una beca de Colfuturo, y ahora está metido en el tema de la ampliación de los mercados de telecomunicaciones en el país.

Dice que el acceso universal al servicio de internet está todavía lejos para el país, aunque piensa que, más que por los operadores, es porque los usuarios no tienen los recursos para comprar los equipos y pagar lo que cuesta Internet. Es decir, que no es un problema tanto de brecha digital como de inequidad estructural.

Los operadores llegan más lejos pero no necesariamente mejor

El último censo nacional de 2018 mostró que el 52 por ciento de los hogares colombianos tenía internet y el 40 por ciento acceso a conexiones fijas. 

La meta de Duque es terminar su gobierno en 2022 con un 70 por ciento de cobertura de internet de alta velocidad, y ese propósito va avanzando, pues en lo que va de su mandato se han sumado unos cuatro millones de usuarios nuevos de internet móvil, y casi 1 millón de internet fijo. 

Según Iván Mantilla, viceministro de Conectividad, la cobertura en las cabeceras municipales es casi completa, lo que contrasta con las zonas rurales, donde apenas hay un 9.6 por ciento de conectividad. 

Los testimonios de siete fuentes que viven en zonas rurales y de algunos expertos muestran por qué cerrar esa brecha es más difícil en el campo y dan cuenta de las peripecias que han tenido que hacer para vivir los días de la pandemia sin internet o con uno muy malo.

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