Las cartas de recomendación dan una aproximación cualitativa al desempeño del estudiante. Además, ayudan a diferenciarlo de otros candidatos, pues resaltan fortalezas específicas y complementan la información numérica de las notas.
Las universidades suelen solicitar entre 2 y 3 cartas que deben entregarse con todos los documentos de la postulación. En ese sentido, recomendamos tramitarlas con 6 meses de anterioridad para evitar contratiempos. Además, es importante reestablecer los contactos con tiempo, hablando e intercambiando correos con los recomendadores. Los consejos generales son:
Escoger los recomendadores: deben ser profesores o jefes que hayan supervisado su trabajo por al menos un semestre. Deben dar cuenta de su desempeño, su trabajo y sus logros. Aunque se suelen solicitar recomendaciones académicas, también se pueden incluir laborales. En programas de MBA son preferibles las laborales.
Proveer información: Reunirse con el recomendador y explicarle su tarea. Luego, enviarle un email corto con los puntos de su perfil a destacar, la fecha límite y la forma de entrega (correo físico, creando un perfil en la página de la universidad o entrega electrónica al candidato). Adjuntar materiales de ayuda: sábana de notas, CV y una muestra de escritura si lo considera relevante.
Evitar: recomendadores con perfiles muy altos que no hayan supervisado su trabajo, celebridades, políticos o colegas en un nivel organizacional similar al suyo. Cartas generales, información exagerada o irrelevante (ideas políticas, religiosas, etc.).
Aunque existe total libertad para redactar el contenido, el recomendador debe considerar que se espera una extensión de entre 1 y 2 páginas que contengan:
Presentación: perfil del recomendador, hace cuánto y en qué circunstancias conoce al recomendado.
Perfil del candidato: descripción crítica de capacidades intelectuales, talentos, hábitos de trabajo, logros, habilidades sociales, intereses académicos, contribuciones, etc; ilustrando con anécdotas específicas. Es recomendable cuantificar el desempeño con mediciones como top 5% (10%, 30% o 50%) de los mejores estudiantes de su clase.
Desafíos y debilidades: aspectos contextuales o personales que el candidato superó, cuáles otros debe fortalecer y cómo un posgrado le ayudaría en esta tarea.
Proyección: especificar por qué es un excelente candidato para un posgrado o una beca y qué proyección laboral o académica tendrá el estudiante a largo plazo.
Estas son algunas instrucciones y ejemplos de cartas de recomendación que podrían servir de referencia:
En alemán: Zeit Campus y MyStipendium.de ofrecen instrucciones generales.
En francés: los diarios Le Parisien y Lettres-Gratuites.com ofrecen ejemplos.
En inglés: las universidades de Alberta; California, Berkeley; Massachusetts Institute of Technology; ofrecen recomendaciones y ejemplos.
En portugués: Formatos de las universidades Federal do Rio Grande do Sul y de Capes que muestran el tipo de información solicitada en universidades de Brasil.